El decorador de la jet-set da el gran salto. Tomás Alía, uno de los más prestigiosos arquitectos interioristas de nuestro país, ha sido contratado para uno de los proyectos más ambiciosos del mundo. Hace unas semanas, el sueño de cualquier diseñador se hacía realidad para Alía: decorar el Palacio del Emir de Catar, en Doha.
Tomas Alía es un estudio internacional que se ocupa de la arquitectura de interiores, diseño industrial, imágenes gráficas y exposiciones temporales. Tomás ya trabajó en 2004 para la Casa Real Española en la boda del Príncipe de Asturias, diseñando el recorrido «Madrid Contemporáneo», en la Gran Vía– lleva colaborando varios años con el Sheik Tamim Al-Thani, príncipe heredero de Catar, y fue él quien le propuso a su padre que fuese el español quien decorase el palacio.
Un total de 54.000 metros cuadrados y más de doscientas salas. Un proyecto de tal envergadura que ha obligado a que el interiorista haya desplazado hasta la ciudad catarí a 200 de sus empleados, que estarán trabajando durante todo un año, hasta que finalicen las obras, previstas para la primavera de 2013. Alía vuela a Catar cada dos semanas para revisar los trabajos, que están siendo laboriosos.
La filosofía y el éxito del estudio Tomás Alía se basa sobre todo en grandes trabajos de equipo, desarrollado en un equipo multidisciplinar.
Sus trabajos son conocidos en todo el ámbito nacional e internacional. Ha tenido numerosos reconocimientos en prensa nacional e internacional, que lo describen como una de las 500 personas más influyentes del país. Recientemente su imagen ha sido asociada a las figuras de jean nouvel, Patricia Urquiola y Zaha Hadid.
